Con casi dos kilómetros de largo y un ancho de unos 750 metros Titisee es sin duda el lago más visitado y por ende el más famoso de toda Selva Negra.
Su ubicación y su perfecta conexión con la ciudad de Friburgo hacen de este lugar una especie de "Benidorm" en algunos días calurosos de fin de semana en verano. Y es que en él te podrás bañar, subirte a una barca a pedales y recorrerlo de una esquina a otra, o simplemente navegar en cualquiera de los dos barcos que van de una orilla a otra del lago.

Pero Titisee no solo es un lago. Es también un pueblo, de origen agricultor, y que hoy en día se dedica en pleno al turismo. Es por eso que en él encontrarás muchas tiendas de souvenirs donde podrás comprar regalos, hoteles y restaurantes.

Nuestra recomendación. No te quedes solo en lo que es el pueblo, camina al menos hasta la orilla sur del lago. Hasta la zona de campings. Hay un camino de tierra que bordea el lago por una de sus orillas. 2,1 kilómetros de ruta. Volver mejor hacerlo por el mismo camino, ya que la otra orilla es carretera.
Y otra cosa. Si eres amante de la bicicleta podrás alquilarla en el pueblo y recorrer los caminos que llegan y salen del lago hacia los bosques y montañas que le rodean.

Visitar las cascadas de Triberg, y el pueblo que las da nombre, es visitar Selva Negra. Y es que se encuentran en un paraje típicamente "selvanegrino": montañas y mucho mucho bosque. Ir desde la entrada principal hasta el puente que atraviesa el último o primer salto de agua (de los siete que tiene) según se vea, es algo increíble.

Nuestra recomendación: Aunque tenga varías entradas, lo mejor es acceder por la principal, la que se encuentra pegada al pueblo. Una vez ya estés dentro, sube por las cascadas por su lado izquierdo hasta el último puente. Después desciende hasta el puente que está debajo y cruza hacia el otro lado de las cascadas, y ya desciende por el otro lado de la cascada.

Precios para entrar y ver la cascada:

• Adultos, 8€
• Niños entre los 6 y los 17 años de edad, 7.50€
• Menores de 6 años de edad, gratuita.

*En los meses de invierno hay un descuento en cada entrada debido a que quizás muchas zonas sean inaccesibles.

Y mucho más diferentes, ya que el salto principal tiene hasta 60 metros de caída y los bosques que la rodean son más de tipo caducifolio, por tanto en los meses otoñales podrás ver un paisaje distinto.
En total la cascada tiene 97 metros de caída dividida en cinco saltos.

Nuestra recomendación: la cascada tiene varias entradas, siendo la más accesible la principal. Es la que se encuentra justo al lado de la curva de la carretera nacional que une la ciudad de Friburgo con Todtnau. Desde este aparcamiento que hay a la orilla de la carretera hasta el salto de 60 metros de la cascada hay poco más de 600 metros de camino llano y sencillo.
Una vez en él, te recomendamos que hagas un pequeño recorrido circular, ascendiendo por la izquierda y bajando por el lado derecho de la cascada.

Una segunda recomendación: en días de calor llévate un bikini o bañador, ya que si quieres podrás refrescarte en un tramo de la cascada que está antes del salto principal, donde se encuentra el puente que atraviesa la cascada.
Y por cierto, si accedes a la cascada por su entrada principal, deberías y resaltamos esto de "deberías" abonar en una especie de hucha que hay allí la cantidad de 2€ por persona. Pero eso sí, solo si accedes por la principal. Si lo haces por las otras entradas no. Cosas raras de por aquí ;)

Muy cerquita de la cima de la montaña más grande de Selva Negra, el Feldberg, se encuentra este lago a una altitud de 1100 metros. Es casi circular, 350 metros de largo por 360 metros de ancho y tiene una profundidad máxima de 32 metros.

Nuestra recomendación: solo podrás llegar al lago caminando o en bicicleta. El aparcamiento más cercano está a poco más de un kilómetro del lago. Es el aparcamiento del Feldberg, el que está cubierto a los pies de las pistas de esquí.
La ruta para ir al lago es en bajada, y luego por tanto toca subir. Es un sendero espectacular, pero eso sí, con rocas en el camino que dificultan un pelín el trayecto. Luego y a una vez abajo, te recomendamos rodear el lago, un kilómetro en total, para así poder disfrutarlo desde sus diferentes perspectivas.
Y oye, ¿por qué no caminar hasta la granja cercana donde podrás comer, beber rica cerveza o probar la famosa tarta Selva Negra? El nombre de esta granja es Raimartihof y está a poco más de 600 metros del lago.

Una cosa que deberías tener en cuenta es que no está permitido el baño. Totalmente prohibido, ya que es zona protegida. Muy protegida. Seguro que incluso verás al "Ranger" vigilar que a nadie "se le vaya la olla" ;)

El Feldberg es, con sus 1493 metros, la más grande de todas las montañas de Selva Negra.
Es muy fácil llegar hasta su punto más alto y poder entonces disfrutar de unas vistas increíbles, ya que hasta en días claro se pueden ver hasta las montañas de los Alpes.

Para llegar hasta la cima solo podrás hacerlo caminando o en bicicleta. Y el mejor aparcamiento donde dejar el coche es el cubierto que hay a los pies de las pistas de esquí. Desde ahí hasta la cima hay unos 3.5 kilómetros de subida sí, pero nada que casi cualquier persona no pueda hacer. Y es más si te quieres quitar la primera parte que es la más "complicadilla", puedes subir en el funicular del Feldberg. Aunque eso sí, nada es gratis ;)

Nuestra recomendación. Además de llegar hasta la cima del Feldberg ve hasta la cima de la montaña Seebuck. Es aquella donde se encuentra un edificio parecido a un faro, que es hoy en día un mirador y el museo del jamón de Selva Negra. Además, desde donde se encuentra el monumento a Bismarck tienes una panorámica espectacular del Feldsee, el laguito del que antes te hablamos.

Lo encontrarás en el llamado "Valle del Infierno", que está entre Titisee y la ciudad de Freiburg. Y es que a pesar del intenso tráfico que soporta la carretera que atraviesa el valle, este lugar es un remanso de paz.
Pero para conocer la garganta, antes deberás conocer el pequeño y antiguo pueblo de Selva Negra, que fue destruido durante la II Guerra Mundial y que hoy en día se dedica en pleno al turismo.

En el "pueblo" tienes una posada histórica donde una tal María Antonieta se alojó durante su trayecto a París, un casa de exposiciones en honor al filósofo alemán Goethe, una tienda donde podrás conocer cómo se trabaja el cristal hace cientos de años, otra tienda en este caso de regalos en general de Selva Negra, una capilla, un molino de agua y un viaducto. Un enorme viaducto por donde pasa el tren que une Friburgo y Titisee.

Nuestra recomendación. Justo una vez pases por debajo del Viaducto llegarás al camino que te mete de lleno en la garganta y donde podrás disfrutar de un paisaje espectacular. Sube con calma y con precaución mínimo hasta el único edificio que hay en la garganta, un antiguo molino de agua. La ruta es de ida y vuelta por el mismo camino. Sencillita e ideal para peques.

Es, con sus 1414 metros de altitud, la cuarta montaña más grande de toda Selva Negra. Es por eso que se ha convertido en un lugar visitado por muchísimos excursionistas que buscan unas vistas espectaculares. Desde su cima podrás ver las montañas de los Vosgos (en Francia), la Llanura del Rin, el Valle de Munstertal, las montañas selvanegrinas más cercanas (como el Feldberg) y en días claros los Alpes.

En la cima podrás encontrar recuerdos de su época celta, ya que aquí se instalaron aquellos pueblos y para ellos, esta montaña era muy venerada. De hecho, su nombre viene de los celtas.
Y a muy pocos metros de la cima tienes un restaurante, que antiguamente era también hotel, y el telesilla o teleférico, dependiendo de la época del año.

Nuestra recomendación. Aunque hay una carretera que sube hasta el restaurante, no podrás utilizarla ya que está restringida a los turistas. Es por eso que te prepares para una buena ruta de senderismo o incluso en bicicleta. Su vertiente norte es la más complicada y con la mayor cantidad de bosque, mientras que la sur está más despejada y podrás ver los mejores paisajes. Subir en teleférico es una gran forma de ahorrarte los tramos más complicados y ya solo te quedará caminar hasta la propia cima y bajar luego por ejemplo hasta las Rapsfelsen.

Si buscas este lugar para pasar una jornada de senderismo es que te gusta muy mucho esto de la naturaleza. Ya que este lugar lo tiene casi todo. En él, podrás disfrutar de un paisaje realmente increíble, atravesado por el río Wutach y al que llegan muchos afluentes que engordan este cañón por sus laterales. 

Pequeñas cascadas, cortados, miradores, pasos complicados, puentes, cabañas... Este lugar esconde muchísimas maravillas que solo podrás descubrir si lo recorres a pie. Y ojo, que es bastante grande y no es fácil elegir la ruta perfecta que se acople a tus necesidades. Dependiendo de donde quieras iniciar tu ruta, las hay circulares, solo de ida y la vuelta la tendrás que hacer en bus...

Nuestra recomendación. Lo primero es que lleves el mejor calzado posible para caminar por el Wutachschlucht, y en la mochila agua suficiente y también algo para comer. 
La mejor ruta, o la más completa es la que nace en el llamado "Kiosk Wutachmühle" y termina en "Schattenmühle". En total, unos 15-16 kilómetros. Eso sí, la vuelta la deberás hacer en el bus que une estos dos puntos.