Baden-Baden

En Baden-Baden, todo gira en torno al lujo y a las apuestas.
Y es que a pesar de ser conocida en la región como la única ciudad en Selva Negra dentro de Selva Negra, la naturaleza que la rodea no es principal motivo de visita a Baden-Baden.
Lo son sus casinos, el teatro, las tiendas y restaurantes de lujo... La llaman "la Mónaco alemana".
Así que la primera parada sería conocer esta parte de la ciudad.
Por cierto, así lo recomendamos porque justo debajo del casino está el mejor aparcamiento cubierto donde poder dejar el coche. Por ubicación y su fácil acceso es la mejor opción ;)

Casino. 
Sí, los franceses fueron los que le dieron a Baden-Baden el arte del juego. Napoléon convirtió la pequeña población de aquel entonces, estamos hablando principios del siglo XIX, en un importante centro político y cultural. Y claro, el edificio del casino fue poco a poco siendo ampliado hasta dejarlo como hoy en día lo podemos ver.
Imagínate: salas y decoración realmente bellas, la gente jugando y apostando... Al menos, merece la pena entrar a verlo.
Sí, podrás visitarlo por dentro siempre y cuando lo hagas mediante una visita guiada. Pero en alemán :( Bueno, como es en grupo puedes hacer la visita, pasar de lo que te diga el guía, si total si no hablas alemán te va a dar igual, y dedicarte a disfrutar de las espectaculares salas.

Trinkhalle.
La conocida como "sala de bebidas" que sirvió en sus orígenes como lugar de curación gracias a las aguas bien conocidas de la ciudad, es uno de los edificios en la actualidad más bellos y representativos de Baden-Baden gracias en parte a sus 16 columnas.
Además, en sus 90 metros de largo se exponen 16 grandes pinturas que nos hablan de historietas y leyendas de la zona norte de Selva Negra. Entre ellas la de la sirena del Mummelsee... ;)

Teatro.
Cerquita del casino se encuentra el edificio del teatro. De arquitectura muy francesa. Fue construido a mitad del siglo XIX y desde entonces es uno de los más bellos e importantes de Alemania. No te puedes ir sin al menos hacer la foto desde sus jardines.

Stiftskirche:
Construida sobre una antigua iglesia románica, la que podemos ver hoy en día fue levantada en el siglo XV en estilo gótico tardío y renovada casi por completo a mediados del siglo XIX. Eso sí, la aguja data del siglo XVIII.
¿Sabes el por qué de su nombre? "Stift" en alemán sería algo así como bolígrafo o lápiz. La iglesia del lápiz. Eso es por la torre del campanario, ya que tiene esta forma :)

Neues-Schloss:
Sobre la plaza del mercado y la Stiftskirche, se alza este palacio que fue construido en 1399 y que no cogió su máxima importancia hasta 1479. Fecha en la que el Margrave Christoph I. lo convirtió en su residencia, sustituyendo al antiguo castillo del que luego más abajo te hablaremos.
Tras el paso de la Guerra de Sucesión del Palatinado el palacio se convirtió más en una residencia de verano, ya que los aristócratas se mudaron al palacio de la ciudad de Rastatt.
El palacio se quiso transformar en un hotel, pero en este año 2022 se paralizó por completo el proyecto. Así que estamos a la espera de ver qué será en futuro próximo. Eso sí, lleva cerrado muchísimos años, por tanto no podrás verlo por dentro.
Podrás llegar hasta la puerta de entrada caminando por sus jardines, y así poder admirar una grandiosa vista de la ciudad.

Callejuelas que merecen la pena del pequeño casco histórico de la ciudad son las que llevan a la iglesia. Entre ellas la Schlosstrasse, la Sonnenstaffeln y la Jesuitenstaffeln.
Y cómo no la Dernfeldstaffeln y la Steinstrasse que llevan al barrio termal, nuestro siguiente objetivo...

Friedrichsbad.
Estas termas fueron construidas entre 1869 y 1877 sobre las ruinas de las antiguas termas romanas. El motivo de tal gigante construcción fue intentar que Baden-Baden no perdiera los turistas de aquella época que venían a los casinos, ya que se planteaba una prohibición del juego que afectaría por completamente a la ciudad. Fue como un plan "b".
Se convirtió en el balneario alemán más importante de Alemania y el edificio termal más bello de Europa.
Hoy en día es una pasada yanto por dentro como por fuera, gracias a sus enormes salas y gigantescas columnas corintias. Eso sí, si quieres disfrutarlo, para entrar tendrás que hacerlo "en pelotas" (desnudo, vamos).

Caracalla-Therme.
Bueno, mucha gente piensa que por llevar el nombre de aquel emperador romano son las termas buenas de la ciudad. Pero no, es el típico spa al que muchos hemos ido en casi cualquier ciudad. Fue construido en la segunda mitad del siglo XX, y lo dicho, es un lugar moderno. 
Si te apetece pasar una tarde en el agua y te da pudor quitarte completamente la ropa, esta es tu opción.

Ruinas de las termas romanas.
Bueno, hemos de deciros que no merecen la pena la visita a no ser que seas un loco/a del mundo romano. Son muy muy normalitas, muy simplonas y además están bajo el edificio de las termas Friedrichsbad. A nosotros no nos llaman mucho la atención. Son mucho mejores las ruinas romanas del pueblo de Badenweiler, entre las ciudades de Friburgo y Basilea.
Es más, para entrar a verlas son 5€ y el horario de visita es muy limitado: todos los días de 11:00 a 12:00 y de 15:00 a 16:00 horas... Abiertas solo de marzo a noviembre.

Museo de la ciudad.
Está situado al fondo de la anteriormente citada "Lichtentaler Allee" y muestra la historia y la cultura de la ciudad desde su fundación romana. 

• Horarios: de martes a domingo, abierto de 11:00 a 18:00 horas. Lunes cerrado
• Precios: adultos, 5€; niños mayores de siete años, 2€; niños menores de seis años, gratuito.

Museo Frieder Burda.
También situado en la "Lichtentaler Allee", es un museo de arte con obras del modernismo clásico y arte contemporáneo, además de tener una exposición permanente sobre la artista "selvanegrina" Frieder Burda y diferentes exposiciones temporales.

• Horarios: de martes a domingo, abierto de 10:00 a 18:00 horas. Lunes cerrado
• Precios: adultos, 14€; niños mayores de doce años, 5€; niños menores de doce años, gratuito.

Museo Fabergé.
Situado cerca de las termas, este museo está dedicado al arte de la joyería de un reputadísimo joyero y zar ruso Peter Carl Fabergé.

• Horarios: viernes, sábados y domingos, abierto de 11:00 a 18:00 horas.
• Precios: adultos, 21€; niños de 13 a 17 años, 9€; menores de 12 años, gratuito. 

Museo Frida Kahlo.
Este lo encontrarás a las afueras de Baden-Baden, muy cerca de la estación de tren. Muestra varias pinturas, trajes, objetos de la pintora mexicana, muldialmente conocida, Frida Kahlo de Rivera.

• Horarios: de martes a domingo, abierto de 11:00 a 18:00 horas. Lunes cerrado
• Precios: adultos, 5€; niños mayores de siete años, 2€; niños menores de seis años, gratuito. 

Altes Schloss.
Fue construido alrededor del año 1100 para alojar en él a los señores de la región por aquel entonces, los llamados Margraves de Baden.
Fue ampliado a lo largo de los siguientes tres siglos, hasta llegar a ¡¡las 100 habitaciones!!
Fue destruido en el año 1599 por un incendio y nunca más se volvió a construir, ya que la residencia de los aristócratas de Bade-Baden pasó a ser el palacio situado cerca del casco antiguo, y posteriormente el palacio de la cercana ciudad de Rastatt.
Hoy en día son unas bellas ruinas con unas vistas espectaculares que se pueden visitar de manera gratuita.

Bosque centenario.
Detrás de esas ruinas del castillo se encuentra un bosque con muchos ejemplares de roble y haya de hasta los 600 años de antigüedad. Además, hay una zona donde unas gigantes rocas nos regalan unas grandiosas vistas de la ciudad y del valle. 
Si te gusta la escalada, este es tu lugar ;)

Torre Merkur.
Uno de los mayores atractivos de Baden-Baden es esta montaña de 669 metros con su torre-mirador en lo más alto y un funicular que sube hasta lo más alto.
Si te animas a subir al funicular (ya que o es andando o en bicicleta no hay forma de llegar a la torre) te decimos que fue construido en el año 1913, y que desde entonces hace un recorrido un kilómetro superando una pendiente de hasta el 53%.
Arriba las vistas son una maravilla. Muy muy recomendable ;)

• Horarios del funicular: en funcionamiento todos los días de 10:00 a 22:00 horas.
• Precios del funicular: 7€ para mayores de 14 años; menores de 14 años: 3,50€